Con el lema «Látidos que escuchan el dolor y son solidarios» hemos celebrado en la Capilla el Miércoles de Ceniza.
Con el ejemplo de la parábola del Buen Samaritano, hemos propuesto tres acciones para este tiempo de Cuaresma:
VER y SENTIR, más allá de lo que ven y sienten nuestros ojos, ver con los ojos del corazón; PENSAR (JUZGAR), conmovernos y emocionarnos de una manera especial con quien tenemos a nuestro alrededor y por último, ACTUAR (COMPROMISO) para no dejar a nadie triste, solo… y así se sienta acompañado en su camino, como una persona que siente el abrazo de un amigo.
Para terminar hemos rezado por la paz en Ucrania.