Los alumnos de 2º primaria viajaron con el trenecito hasta las inmediaciones del Castillo de Burgos. Allí, divididos en tres grupos y con la compañía de los niños de un colegio cercano al nuestro y tres monitores pudieron adentrarse en el mundo de los duendes y hadas para expulsar a los ogros que impiden que disfruten de este y otros bosques. Después utilizaron sus sentidos, esta vez solo cuatro de ellos: vista, olfato, tacto y oído para percibir guiados por una monitora datos y matices de la naturaleza que a veces pasan desapercibidos. Finalizaron su viaje con un taller en el que fabricaron un bolsita para perfumar su armario elaborado con sales y plantas como lavanda, anís y romero, de las que conocieron primero sus propiedades. Fue una experiencia inolvidable que esperan poder repetir.